sábado, 9 de julio de 2016

monito tragón

A monito le gusta sentarse en las ramas de los árboles (más aún en Verano) con un gran tarro de miel entre las piernas y sentir la brisa en la cara, mientras los deditos de su mano van sacando miel para llevársela a la boca -hummmmm-. Le gusta la manera que tiene el viento de cantar y quedarse casi dormido con la mano en la boca, sonriente y esperando a niña gigante.

Hoy, como ayer, monito está subido en lo alto del árbol más alto del bosque, con los ojos entrecerrados y el sabor dulce de la miel en el paladar, concentradísimo en sus pensamientos y sueños.

Tan ensimismado está, que no ve cómo niña gigante se acerca sigilosamente. Conociéndola ¡seguro que quiere darle un buen susto!

Poco a poco sube en silencio al árbol de monito y de un salto ¡se abalanza sobre él! es tan grande el susto, que monito da un bote y el tarro de miel se le escurre de entre las manos, cayendo desde lo alto del árbol más alto. A punto está también monito de caer, pero niña gigante, que sabía lo que iba a suceder, le agarra con fuerza de la pata izquierda y lo deja sobre sus hombros. 


Monito no sabe si está más asustado que enfadado o al revés, o las dos al mismo tiempo, pero lo que sí sabe seguro es que se siente inmensamente feliz por ver a niña gigante allá.

-¡Niña gigante! ¡que susto me has dado! siempre me pillas - exclama monito con una sonrisa de oreja a oreja dibujada en la cara.
-No tienes remedio, monito, jejejeje - le responde divertida niña gigante - yo que venía a pedirte un poco de miel, jajaja.
-¡La miel! ¡Aya! me temo que se me resbaló el tarro de entre mis manos y se estrelló contra el suelo, se deben estar poniendo las botas las hormigas - responde monito casi con tristeza.
-¡Ay! ya no podremos compartir ese tarro de miel casi vacío que tenías entre manos, tragón, jajajaja - ríe niña gigante.

Y es que monito, entre sueños y pensamientos, mano va, mano viene, había acabado con toda la miel, y ni las hormigas pueden disfrutar entre los restos del tarro.

Niña gigante mientras, abraza y baila con monito, y le canta al oído:

"tragón, tragón, 
monito tragón, 
comiste toda la miel 
y casi te llevas un buen coscorrón..."

Los dos ríen y buscan otro tarro para compartir...