martes, 18 de junio de 2013

Despertar feliz

Monito y Niña gigante estaban merendando queso, cerezas y miel al lado de un gran árbol, estaban muy callados, más callados que de costumbre y era porque estaban muy concentrados pensando una solución a un problema que les había planteado su amiga la rana. 

Y es que rana tenía un humor terrible por las mañanas, se despertaba cansada y enfadada, no quería despertarse y cada mañana tenía que luchar un buen rato para poder ver el sol. Le pidió ayuda a sus amigos porque ella sabía que son muy buenos buscando soluciones. 

Los dos contagiaban sus sonrisas a todos los que se cruzaban en su camino... A todos, menos a uno, claro  .... al terrible Caragato que nunca nadie lo había visto sonreír ...... pero eso es otra historia.... 

La merienda seguía silenciosa hasta que un grito de Niña gigante sobresaltó a Monito que casi se tragó una cereza del susto !!!

- Monitoooooo !!! Ya se lo que tiene que hacer rana para despertarse feliz !!!! Gritó Niña gigante. Cuando yo era pequeñita.............porque yo tambien fui pequeñita............pero eso es otra historia ...

Niña Gigante le explica mientras meriendan, cómo hacer para despertarse feliz
Pues escucha, mi papá me dio la clave para despertarme siempre feliz.

Un día me desperte muy triste y cansada, mi papá, intentaba sin parar, arrancarme una sonrisa, pero no era nada fácil, tenía sueño, frío, cansancio y mis ojos se negaban a abrirse, por eso mi papá cogió una caja de pinturas, unos botes de purpurina y una gran cartulina, en ella empezamos a dibujar, todo, todo lo que más me gustaba; así dibujé, una caja de pasteles de colores, un perrito de melenas con un ojo negro, un columpio colgado de las nubes, unas olas en una playa, un arcoiris gigante, mi bicicleta con cesta y un montón de estrellas.

Cuando  estuvo acabado el dibujo lo pegamos justo al lado de la cama, para que cuando me despertase fuese lo primero que vieran mis ojos y por supuesto...........  funcionó.

La mañana siguiente me desperté más temprano que de costumbre, quería ver mi poster colgado, empezé a mirar cada dibujo y a imaginarme jugando en la playa, riendo en el columpio, bajando una cuesta muy grande en mi bicicleta y sin darme cuenta estaba sonriendo y féliz, con ganas de levantarme y correr a tomarme un gran desayuno, con ganas de ir al colegio y de comerme el recreo, con ganas de ver a mi perrito y de disfrutar el día !!!

Así es como mi papá me enseñó a despertarme féliz, pensando siempre en las cosas que más me gustan, eso es lo que le diremos a rana y así será féliz cada mañana.

-Niña gigante, por favor, dijo Monito, ¿me ayudaras a hacer mi dibujo de despertar?

-Claro que si Monito!! corre a buscar las ceras...